Si Cher es la artista más comprometida con nuestra política nacional, Katy Perry parece ser la más concienciada con la situación de su país. Si algo bueno podemos decir de la intérprete de Roar, es que es una de las caras más visibles de la campaña a elegir candidato presidencial a los Estados Unidos. Que se moja. Y es que a pesar de ser noticia estos días por la simulación sexual y los tocamientos que realizó Madonna con ella en un concierto esta semana, la cantante está más implicada que nunca en temas  mucho más serios.

Por suerte, este apoyo no va a parar al bando republicano, o peor aún, a Donald Trump. Y después de las (muy) bochornosas declaraciones de Britney Spears hace unos años, en las que clamaba que había que apoyar a su presidente  (en plena guerra de Irak) en toda circunstancia y en cada decisión que tomara, no está de más valorar el apoyo de una estrella del pop un poco más nítido, más meditado y más progresista.

Y es que recordemos, que desde la llegada de Bernie Sanders, todas las posiciones de los demócratas han virado sensiblemente a la izquierda (teniendo en perspectiva lo que supone la “izquierda” estadounidense).

Recordemos esta pieza de Vergüenza ajena política Spears en pleno gobierno guerrillero de George W. Bush

¿Veremos en España a Malú apoyando a Rajoy? ¿A Pablo Alborán apoyando a Pedro Sánchez? ¿A Bebe apoyando a Podemos? ¿ Veremos a Beth apoyando la CUP?  Nosotros siempre a favor de que los artistas se mojen en política. Leticia Sabater, abstente.