
Dejando una noche de reyes triste y melancólica. Así, se te has ido hoy, como no podía ser de otra forma.
Nunca fue un artista de grandes masas. Pero tenías cientos de incondicionales que llenaban las salas de tus conciertos una y otra vez.
Cuantas noches de Libertad 8 dejadas atrás.
Tu inminente nuevo disco, La tristeza de la Vía Láctea, no llegará a nuestros oídos. Pero a muchos, tu “Vuela” nos cambió muchas cosas. Más de las que pudiste llegar a imaginar.
Y tu “Haley 2061“.
Y las conversaciones olvidadas de 2007.
Tu fuiste la guinda del pastel de 1.999.
Ahora, ya junto a Lorca, podrás gritarnos que seamos valientes, una vez más.
Y seguiremos, en Galileo Galilei, esperando, para siempre, tu último concierto.
Una vez más.
¿Cómo sabes que ha sido por cáncer?
No es correcto lo del cáncer. Por lo demás, gracias por recordarle
Por cierto ¿2 de enero? El fallecimiento se produjo el 5 de enero.